Introducción. Capítulo I. Infractores políticos e infractores comunes. Diferentes sanciones. Finalidad de aquellos. Benignidad teórica. Capitulo II. Clasificación de los regicidas. Criterio del Dr. Regis. Ideas del P. Juan de Mariana, autor de “De rege et regis institutione”. La tiranía, según Víctor Alfieri. Síntesis histórica acerca del regicidio, de los regicidas y de la justicia que asiste a los pueblos para sacudirse los regímenes arbitrarios y tiránicos. Opiniones de Aristóteles, Cicerón, Hugo Van Groot, Pufendorff, Barbeyrac, Vattel, Juan Bautista Massillón, Blackston, Duguit, Miguel Lanz Duret, etc. Capitulo III. El delito político en México, a partir de 1910. Abundancia de esta figura delictiva en las contiendas electorales. Políticos delincuentes. Capítulo IV. Naturaleza del delito político. Definiciones. Haus, Filangieri, Ortolán, Garraud, Vidal. Normas de nuestro derecho positivo. Conspiración, rebelión, asonada o motín. Rebelión y Revolución. Especificación de términos. Variaciones de la represión del delito político. El delito político y la extradición. Consideraciones distintas. Capitulo V. Clasificación de los delitos políticos. Complejos, conexos, concurrentes. Criterio de Jiménez de Asúa sobre el delito político. El caso de León Toral. Obregón, el caudillo. Capitulo VI. Clasificación de los delincuentes políticos, según Quintiliano Saldaña. Cuadro de las infracciones comunes. Comento y critica. La obsesión en la delincuencia política-social. Deficiencias de la clasificación del maestro Saldaña. Mimetismo. José de León Toral, como obseso. Jesús, Franklin, Sadi Carnot, Zolá, Arquímedes. Jesús, el más insigne infractor político-social. Ligerísima consideración acerca de la génesis de la obsesión. Capitulo VII. ¿Es peligroso el delincuente político? Ataca a las castas o clases gobernantes. Situación real de los infractores políticos en México. Capitulo VIII. Criterio de Narciso Bassols y Vicente Peniche López, acerca del delito político y de la realidad mexicana. Comentario. El triunfo o el fracaso del infractor no varían la naturaleza de la figura delictiva. La impunidad de los vencedores no implica no violación de las normas jurídicas. Abundancia de los delincuentes políticos y de los políticos delincuentes en nuestro país. Necesidad de combatir la arbitrariedad y la injusticia, según Von Ihering. Capitulo IX. Sanciones. Virajes punitivos acerca de la delincuencia política. Gravedad de las represiones en la URSS, Alemania e Italia. El delito político en la Rusia zarista. Advenimiento de la Revolución rusa. Crueldad contra los inadaptados estatales o infractores políticos. Criterio de Jiménez de Asúa. Capitulo X. El delito político y los tiranicidas a través de épocas y pueblos. El crimen majestatis. Persia, Babilonia, Japón, Perú, China, Roma. Justiniano en sus novelas o auténticas recoge la penología contra los delincuentes políticos. Edad Media. Revolución francesa. Constitución política de 57, en México. Teorías y realidades. La pena de muerte para los delincuentes políticos. Constitución política de 17. Conquistas importantes. Expresión de motivos del código penal de 1871, para el Distrito y Territorios Federales. Criterio de Martínez de Castro sobre el delito político. Sucinta alusión a las leyes penales de 1931 y a los usos penitenciarios mexicanos. Aspectos etiológicos de la delincuencia común. Capitulo XI. Políticos delincuentes. Huerta, Obregón, Calles, Garrido. Breve enumeración de hechos delictuosos consumados por políticos delincuentes. Algunos crímenes del callismo: Huitzilac, Topilejo. – Morelos, Bolívar, Martí, Sarmiento, Montalvo, Rodó, nos fuerzan a no renegar de la estirpe. Montalvo, Vasconcelos: infractores políticos-sociales. Capitulo XII. Brevísima consideración acerca del derecho y de la Revolución. El socialismo, el odio a la iglesia católica; la mano judaica. Marxistas y católicos, como infractores políticos (conspiradores, sediciosos, rebeldes, etc.) el agua muerta del porfirismo. La fu